Algunos dicen que es mi venganza. Pero no es así. Es otra lección y digo otra porque les vengo advirtiendo hace tiempo ya. Primero enfurecí mis mares. Lo llamaron Tzunami. Después arrasé un pueblo entero. Lo llamaron Katrina. Inundé ciudades. Tiré puentes abajo igual que ellos talaron mis árboles.
Nevé en pleno verano. Subé la temperatura a más de 40 en pleno invierno. Lo llamaron Calentamiento. Derreté glaciares. Les hice sonar alarmas como gritos con rayos y truenos y no me escucharon.
Ahora les mandé un bichito muy contagioso. Lo llaman Covid 19. Esta vez se asustaron mucho y se encerraron en sus casas. Y no sé cuanto tiempo los tendré ahí.
Mientras tanto yo la estoy pasando muy bien. Respiro aire puro. Mis pulmones se limpiaron. Mis ojos ven de día un hermoso cielo azul. Y cómo brillan mis queridas estrellas de noche. A algunas hacía mucho que no las veía.
Los campos están muy verdes y qué hermoso silencio me circunda sin todas esas máquinas que me aturden constantemente. Me pregunto si esta vez aprenderán. Porque si no ......tendré que pensar en otra cosa.
Comentarios
Publicar un comentario